La alegría de un proyecto
La alegría de un proyecto
Mientras participaba en los foros de homeopatía por medio de internet, llegó a mi conocimiento la petición de una homeópata en Estados Unidos de ayuda para los afectados por el tsunami en Bali (Indonesia). Solicitaba cualquier tipo de ayuda, desde libros hasta medicamentos homeopáticos, ayuda homeopática incluida en su siguiente viaje a Indonesia.
Yo me interesé por el tema y le ofrecí mi ayuda, aunque limitada en aquel momento por mi falta de experiencia, más que por mi disponibilidad de tiempo. Tras unos cuantos posts, terminé poniéndome en contacto con Silvia García, del departamento técnico del Laboratorio Homeopático Iberhome.
Le comenté la posibilidad de que el laboratorio aportara unas cajas de medicamentos, aunque estuvieran a punto de caducar, dado que todos sabemos que la homeopatía no caduca, pese a que la Agencia del Medicamento así lo imponga. Me dijo que lo hablaría y que le pasara la información. Me dijo que me contestaría pronto.
No habían pasado 24 horas cuando me contestó que sí, que lo harían: prepararían un envío de medicinas homeopáticas para Indonesia. Me volví a poner en contacto con la homeópata estadounidense y acordamos medicamentos, dinamizaciones y modo y fecha de envío.
Días después bajé al laboratorio, y tomé café con Silvia y con Esther. Charlamos y más tarde nos fuimos a comprar unas cajas a la papelería. Cuando volvimos, empezaron a sacar medicamentos, tubos y potencias. Yo no me atrevía a pedir nada, acordándome del proverbio chino: “un pobre no puede exigir que la comida esté caliente”. Pero el laboratorio entero se puso manos a la obra: las chicas entraban con sus batas y con sus bolsas de medicamentos a preguntarme; íbamos apuntando las cepas y las dinamizaciones, íbamos empaquetándolas y poniéndolas ordenadamente en las cajas, íbamos seleccionando las cepas sobre la marcha en función de lo que nuestros conocimientos no decían que podrían ser útiles en Indonesia. Y –decisión final- ninguno de los medicamentos estaba fuera de fecha: todos habían sido preparados expresamente para este envío. Guardo todavía el recuerdo de su extrema generosidad y de su alegría al pensar que su “regalo” iba a ayudar a personas desfavorecidas.
Terminamos de empaquetar y me fui a correos a enviar la caja con casi setecientos tubos de remedios. Una vez enviado, me puse en contacto con la homeópata de Estados Unidos y lo di por terminado.
Tiempo más tarde, apareció en el foro una carta de gratitud hacia nosotros por el esfuerzo, el dinero y el tiempo empleado.
De toda esta experiencia, lo que más me impactó y lo que sigue vivo en mi retina y en mi corazón es que todo el laboratorio participó como una sola mano; que nadie desconfió de mi persona ni de mis intenciones; que nadie me pidió informes, cartas o direcciones; que nadie me recordó el hecho ni se apropió del esfuerzo. Creo que la generosidad, el trabajo sencillo, sereno, preciso y humano de todas y cada una de las personas del laboratorio (especialmente de Silvia, Esther, Raquel y Marisa) confirmaron cuanto había soñado cuando empecé a estudiar homeopatía: que hay, más allá de los intereses económicos y de la materialidad, una humanidad en las personas que aflora en cuanto surge la necesidad, el momento o la circunstancia; que se puede tener una empresa y sin embargo ser delicado en lo humano; que se puede ser generoso y confiado, y a la vez eficaz y certero.
Empecé a estudiar homeopatía porque siempre creí que era una terapia que defendía lo más humano de nuestro ser; el comportamiento de todas estas personas del Laboratorio Iberhome confirmó que no me había equivocado en mi decisión.
Visitar el laboratorio y tomar un café con ellas es uno de los momentos de mayor satisfacción: saber que estoy con amigas y que participamos en proyectos que nos llenan y nos exceden. ¡Qué más podría pedir!
http://forums.hpathy.com/forum_posts.asp?TID=5875&KW=Andres&title=donation-of-remedies
http://www.otherhealth.com/homeopathy-discussion/8841-donation-remedies.html
http://forums.hpathy.com/forum_posts.asp?TID=6140&KW=Andres&title=health-clinic-for-the-poor
Foto PHz10 cedida por P. Schmidt Bubath
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